El oro no para de subir. Una de las producciones nacionales alcanzó un record de 1.600 dólares para cada onza, y ahora se estima que el metal seguirá subiendo con el transcurso del tiempo. Algunas estimaciones ubican al oro en los 1.900 dólares dentro de 3 meses, y se supone que llegará a los 5.000 dólares la onza en el año 2020.
Desde hace dos semanas, la suba del oro es imparable, esto se debe a dos causas: por un lado, la crisis de la zona de Europa y, por el otro, la falta del avance de los republicanos y demócratas para llegar a un acuerdo en términos de un plan de reducción de déficit en los Estados Unidos. Los ahorristas del mundo se están preparando para la entrada en déficit del país del norte, con lo cual la demanda (y el precio) del oro despegaron.
Se sospecha que, mientras estos dos problemas no tengan solución, el precio del oro continuará subiendo. Los analistas de alrededor del mundo estiman que la recesión que llegará el año que viene a los Estados Unidos será aún mayor que la de 2008, y por ende muchos ya están tomando recaudos en caso de que esto suceda.
Los mercados financieros que operan con oro tienen muchas herramientas para poder sacarle provecho a esta nueva “fiebre del oro”, pero lo fundamental a tener en cuenta es que Argentina es uno de los principales productores de este metal en el mundo. Por ende, aunque la recesión sea una mala noticia para los Estados Unidos, para Argentina significará un incremento en la producción y en las ganancias. Veremos cómo se desenvuelve el avance del oro y la minería en San Juan, que no para de subir.
